sábado, 4 de diciembre de 2010 | By: Ashleth

Hoy dijimos adiós...


Hoy dijimos adiós…

El momento que más temía, llegó, “nada es para siempre”, todos lo dicen, yo seguía aferrada a esa estúpida idea de que puedes permanecer eternamente con alguien, creo que debo empezar a hacerme a la idea de que no es así…

Hoy dijimos adiós…

Mi mundo se vino abajo, no quisiste decírmelo, pero supe que era lo que querías, imagino que el ver a tus seres queridos llorar a causa de algo o alguien a quién amas, no ha de ser muy agradable, espero nunca vivirlo…

Hoy dijimos adiós…

Cientos de lágrimas recorrieron mis mejillas, insisten en querer salir a volverse parte de este fétido mundo, lleno de ideas equívocas e inundado de prejuicios acerca de todo lo que está fuera de lo “correcto”…

Hoy dijimos adiós…

Dos corazones rotos a causa de la felicidad de uno, aún me pregunto si vale la pena, si yo seré la egoísta, la que pone en la balanza y prefiere elegir la felicidad propia y la del segundo corazón en cuestión…

Hoy dijimos adiós…

Jamás me arrepentiré de esos momentos que vivimos, me hiciste conocer el amor, me demostraste que existía, me di cuenta de lo que soy capaz de hacer por él…

Hoy dijimos adiós…

Sé que jamás me recuperaré de este dolor que siento, seguramente sobreviviré, pero será una herida eternamente abierta, un corazón roto, una mente con un dato imposible de borrar…

Hoy dijimos adiós…

No me quedan ganas de volver a reconstruir mi “vida”, pedazos de ella tirados en el suelo, serán imposibles de romper nuevamente, puedo pisarlos una y otra vez, no habrá diferencia…

Hoy dijimos adiós…

Todo vuelve a carecer de importancia, vuelvo a ser un “no viviente”, antes de ti, no tenía problemas con serlo, pero lamentablemente ahora conozco lo que es vivir…

Hoy dijimos adiós…

Quisiera luchar por lo nuestro, pero si tú no lo quieres así, nada puedo hacer, no hay nada recuperable cuando se interpone felicidad ajena…

Hoy te digo adiós.